Enfoca tu producción a la necesidad, deseo y demanda de tus clientes

Aunque parecidas, estas tres palabras no significan lo mismo. Necesidad, deseo y demanda son tres conceptos que funcionan por separado, pero que necesitan uno del otro para lograr un objetivo: que el artículo, producto o bien consumido por el cliente sea de calidad y que garantice fidelidad. 

Aunque parecidas, estas tres palabras no significan lo mismo. Necesidad, deseo y demanda son tres conceptos que funcionan por separado, pero que necesitan uno del otro para lograr un objetivo: que el artículo, producto o bien consumido por el cliente sea de calidad y que garantice fidelidad.  

Orientar esas tres palabras al cliente es ponerse en sus zapatos y preguntarse qué le interesaría, cómo le interesaría y de qué forma le interesaría. Para esto es necesario hacer una lectura de las necesidades y, además, de los deseos del consumidor. 

Para entender las necesidades del consumidor es necesario ponerse en sus zapatos y emplear una estrategia que permita conocerlo más y darle los productos que desea.  Imagen de Gerd Altmann en Pixabay.

Con necesidades nos referimos a “una sensación de carencia”, lo que ubica a esa palabra en la subjetividad de cada persona. Es decir, cada cliente tiene una necesidad diferente. La psicología ha identificado cinco categorías de necesidades: básicas, de seguridad y protección, sociales, de estima y de autorrealización.  

Un ejemplo puede ser la necesidad de un carro. Para una persona puede ser una necesidad básica, si necesita el automóvil únicamente para transportarse, sin importar la marca o el modelo, pero para otra persona puede ser social o de autorrealización si se fija más en el tipo de carro. El papel de la industria y de las empresas en esos casos es saber identificar las necesidades de los clientes para saber qué es lo que le interesa.  

Los deseos del consumidor van un poco más allá que las necesidades y responden a esta pregunta: ¿Cómo una persona expresa la manera de satisfacer una necesidad? Sigamos con el ejemplo del transporte; una persona tiene la necesidad de movilizarse de un lugar a otro y su deseo se manifiesta en elegir qué modo de transporte utilizará: ¿Comprará un carro para movilizarse todos los días? O ¿preferirá tomar transporte público y ahorrar costos?  

Esos deseos están atravesados por varios factores que las industrias y las empresas deben comprender, como las características de cada persona a nivel social, cultural y económico.  

Finalmente, la demanda tiene que ver con la materialización del deseo: ¿qué decidió nuestro cliente? ¿comprar un carro o tomar transporte público todos los días para economizar gastos? Las acciones de las industrias y las empresas deben enfocarse siempre hacia el cliente, leer sus necesidades y deseos y así lograr que el producto final sea el ideal.  

Enfocar la producción de tu empresa en la necesidad, deseo y demanda de tus clientes seguro traerá muy buenos resultados. Regístrate en Inndustrial, conoce más sobre la necesidad, deseo y demanda y comparte también tu experiencia con estos conceptos aplicados en la industria. 


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